Con muy pocos clientes, pero con la responsabilidad de salir a trabajar todos los días para llevar el pan a su familia, sigue en la batalla dando bola.
“En estos tiempos de pandemia el negocio bajó mucho, solo hago una o dos boleadas al día, en ocasiones ninguna, nada”, señala y agrega que cada trabajo tiene un costo de 25 pesos.
Con más de 18 años de trabajar sin falta, cada día desde muy temprano Enrique Rodríguez Fuentes, originario de la Ciudad de México, acude a la esquina de la calle General Mariano Escobedo y avenida Álvaro Obregón, donde tiene su carreta para bolear zapatos.
Sacar lustres y renovar el calzado de hombres y mujeres, ha sido su labor durante casi dos décadas, trabajo honesto con el que ha sacado adelante a su familia.
“Hace más de 18 años empecé este negocio aquí en la esquina del Seguro Social, de Nogales, Sonora, un lugar muy noble, donde he trabajado por muchos años.
“Tengo 37 años en Nogales, ya tengo raíces en esta noble frontera que son mis hijos, hoy nos toca vivir tiempos difíciles, debemos enfrentar esta situación con responsabilidad.
“A penas el 2 por ciento de mi clientela acude a lustrarse su calzado, anteriormente lograba hasta 15 boleadas en un día, hoy estoy sacando una o dos nada más, he tenido días que no boleo, me voy sin trabajar, limpio, sin dinero”, acentuó.
A los trabajadores como yo, les recomiendo ser conscientes y estar protegidos, cumplir con las medidas recomendadas por las autoridades de salud, ya que debemos de seguir trabajando.
“Son tiempos difíciles los que estamos viviendo, sin embargo tenemos que estar al pie del cañón, tengo fe de que un día esto va a terminar, esta pandemia vino a probar a todo el mundo.