El incidente, ocurrido el 03 de febrero, involucró a dos cazadores, cuyos nombres aún no han sido revelados oficialmente por las autoridades para proteger su privacidad. Se sabe que uno de ellos sufrió un accidente durante una excursión de cacería en una zona extremadamente accidentada y remota, cerca de Arivaca, Arizona. "La condición del terreno dificultó enormemente las labores de rescate", comentó un agente de la Patrulla Fronteriza, bajo condición de anonimato.
La gravedad de la situación demandó una respuesta rápida y eficiente. Agentes de la estación de Tucson y el equipo de rescate aéreo BORSTAR se movilizaron de inmediato. El acceso al área accidentada solo era posible por aire, lo que complicó aún más la operación de rescate.
La tecnología jugó un papel crucial. Gracias a la precisión de las coordenadas proporcionadas por el otro cazador y a la avanzada tecnología de rastreo satelital, la ubicación del accidentado se determinó con exactitud. Posteriormente, un helicóptero equipado con una grúa y una camilla de rescate fue desplegado para llevar a cabo la compleja operación.
Después de estabilizarlo y brindarle primeros auxilios in situ, el cazador herido fue izado cuidadosamente con la grúa del helicóptero y trasladado a un hospital en Tucson para recibir atención médica especializada. Su estado de salud actual no ha sido revelado públicamente, pero se espera una pronta recuperación.