MIAMI, FL
Miami trata de evitar una delantera de 2-0 de los Toros de Chicago.
El Heat de Miami ha pasado por estos trances anteriormente.
Estuvieron en desventaja contra Indiana en las semifinales de la Conferencia Este la temporada pasada, debieron ganar un par de partidos de vida o muerte contra Boston en la final de conferencia y luego perdieron el primer partido de la final de la NBA contra Oklahoma City. A fin de cuentas, el Heat se llevó el título.
Ello podría explicar por qué el martes el Heat no cayó presa del pánico. Perder el primer partido de la serie semifinal de la Conferencia Este contra los Toros la noche del lunes difícilmente era algo que el Heat deseara, aunque podría servir como llamada de atención para un equipo que ganó 66 partidos en temporada regular.
“No habíamos perdido en un tiempo, así que fue muy diferente venir y lidiar con una derrota... en playoffs en casa”, dijo Dwayne Wade, del Heat, luego de una sesión de entrenamiento. “Fue diferente a lo que nos hemos acostumbrado últimamente, pero no es diferente a lo que estamos acostumbrados como equipo. Hemos tenido momentos difíciles. Hemos perdido partidos en el pasado”.
La victoria de Chicago por 93-86 en el primer partido de la serie está llena de anormalidades estadísticas, como que Miami encestó menos de 40% de sus tiros (su segundo peor desempeño en 87 partidos esta temporada) y que los Bulls metieron 35 puntos en el cuarto período, la máxima cantidad admitida por el Heat en los últimos 12 minutos reglamentarios en toda la temporada.
El Heat sabe que debe cambiar algunas cosas o podría meterse en problemas.
No se prevé que Chicago cambié su alineación para el segundo partido.