MIAMI, Fla
Miami iguala la serie con paliza, Chicago pierde los estribos.
Y eso que el Heat de Miami estaba en apuros.
Seguro, perdieron la ventaja de anfitriones en las semifinales de la Conferencia Este. Pero un dominio absoluto sobre los Toros de Chicago el miércoles en el segundo partido restableció la sensación de que los campeones reinantes de la NBA son los claros favoritos para revalidar el cetro.
El Heat exhibió todo su poderío al vencer 115-78 a los Toros y empatar a una victoria por bando la semifinal de la Conferencia del Este de la NBA.
Ray Allen anotó 21 puntos y LeBron James aportó 19 en el abultado triunfo.
Fue el mayor margen de victoria para el Heat en una postemporada, rebasando los 35 puntos que le sacaron al Magic de Orlando el 24 de abril de 1997.
“Aún estamos en un aprieto”, dijo el entrenador del Heat Erik Spoelstra, cuyo equipo necesita ganar por lo menos un partido en Chicago para salir adelante en esta serie.
Los Toros cometieron seis faltas técnicas, y Joakim Noah y Taj Gibson fueron expulsados en el tramo final del partido en el que Miami llegó a sacar una ventaja de hasta 46 puntos.
“Ignoro cuántas técnicas recibimos. Perdimos los estribos”, dijo el francés Noah.
Con la serie empatada 1-1, la serie se traslada el viernes a Chicago para el tercer partido.
Norris Cole encestó 18, Dwyane Wade añadió 15 y Chris Bosh consiguió dentro del recital ofensivo de Miami.
Marco Belinelli coló 13 para los Toros, mientras que Noah agregó 12 y Nate Robinson tuvo 11.
Los Bulls apenas lograron encestar 36% de sus tiros al aro, mientras que Miami acertó el 60%. El Heat estaba arriba 42-38 con 3:42 por jugarse en la primera mitad, antes de lanzar una acometida de 62-20.
Tras una noche cargada de tensiones e infracciones, la liga casi seguramente va a revisar algunas de las cosas que se dijeron en un partido que estuvo apretado por los primeros 20 minutos, antes de convertirse en una vergüenza para los Toros y un exceso de glorias para el Heat.