MUNICH, Ale
En un emocionante duelo entre Eslovenia y Serbia, la emoción se desbordó en el campo. Žan Karničnik inauguró el marcador para Eslovenia, acercándolos a una histórica victoria que parecía al alcance de sus manos. Sin embargo, la entrada del suplente Luka Jović cambió el rumbo del partido, igualando el marcador en tiempo de descuento y desatando la euforia entre los aficionados serbios, quienes celebraron con bengalas y lanzando objetos al campo.
El gol del empate, que llegó en la última acción del partido, dejó a los jugadores eslovenos en un mar de decepción, mientras el árbitro pitaba el final del encuentro en medio de la tensión. Eslovenia, que viene de empatar con Dinamarca en su primer partido, se prepara para enfrentar a un duro rival: Inglaterra, en el juego que definirá su suerte en la fase de grupos.
Por su parte, Serbia, que había caído ante Inglaterra en su debut, se medirá contra los daneses en busca de su primera victoria en el torneo.