Walker Buehler renace con los Filis: exDodger busca revancha en la NL Este

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El murmullo en Citizens Bank Park crece conforme se acerca el primer lanzamiento. No es cualquier viernes de béisbol: Walker Buehler, el mismo brazo que selló el título de los Dodgers en 2024, ahora viste la franela roja y beige de los Filis

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René Cardenas el 11/09/2025 06:28 PM.
En Deportes y editada el 11/09/2025 06:59 PM.

La ironía no pasa desapercibida.

Detrás de ese guante de pitcher hay una historia de reinvención. "Se trata un poco de volver a ponerme en pie", confesó el lanzador de 31 años tras su debut en Triple A con Lehigh Valley. Los números respaldan su urgencia: 5 ponches, 47 strikes en 78 lanzamientos y solo dos carreras permitidas en tres entradas. Filadelfia no contrata recuerdos, sino esperanzas.

El contexto: Los Filis lideran la División Este de la NL, pero perdieron a su as Zack Wheeler por lesión.
La apuesta: Buehler firmó por el resto de temporada, con elegibilidad para postemporada.
El dato crudo: En 2024 con Boston, su ERA fue 5.45 en 23 juegos antes del despido.

Lo que realmente enciende al derecho no son solo fastballs. Su batalla contra el ABS (Sistema Automatizado de Llamadas) revela su filosofía: "El elemento humano es parte enorme de este juego. Los lanzadores veteranos merecen ciertas partes del plato". Critica la ubicación inconsistente del sistema en las menores, donde sintió que "ni siquiera está realmente en el plato".

El 21 de julio pasado, en este mismo estadio pero con los Medias Rojas, Buehler mostró destellos de su mejor versión: 7 entradas, 1 carrera limpia y solo 4 ponches. Hoy, con Harper y Schwarber respaldándolo, busca escribir un capítulo distinto. Kansas City será solo el prólogo.

Mientras ajusta su gorra y revisa la señal del catcher, un detalle resuena: en su última apertura antes del despido de Boston, enfrentó a los Yankees desde el bullpen. Permitió dos carreras en 2.1 entradas. Ahora, con la presión de una carrera divisional y la sombra de su contrato millonario, cada lanzamiento pesa más que un fastball de 98 mph.