El mundo de la música despide con tristeza a Mísia, la icónica cantante portuguesa que revolucionó el fado con su estilo innovador y su valentía para experimentar con nuevas sonoridades. Mísia falleció el pasado sábado a los 69 años en un hospital de Lisboa, tras una larga batalla contra el cáncer. Su funeral se llevará a cabo el 7 de agosto en Lisboa, donde será enterrada.
Nacida en Oporto en 1955, Mísia comenzó su vida artística en Madrid y Barcelona, donde se vio influenciada por la movida madrileña mientras trabajaba en un cabaret. Esta experiencia marcó su carrera, llevándola a explorar y fusionar diferentes géneros musicales. A lo largo de su prolífica carrera, Mísia publicó 15 álbumes, entre los cuales destaca 'Animal sentimental' (2022), en los que interpretó fado, tango y boleros.
Yo no me pregunto 'por qué a mí', me pregunto 'por qué no yo' porque no soy distinta de los demás. Soy una superviviente desde pequeña. Aprendí a ser muy independiente en una familia en la que mi yaya catalana, una vedette de burlesque, me enseñó todo lo bueno, dijo Mísia en una entrevista en 2019.A lo largo de su carrera, Mísia recibió numerosos reconocimientos, como la Orden del Mérito de Portugal, la Gran Medalla Vermeil de la Ciudad de París y el título de Caballero de la Orden de las Artes y las Letras de Francia. También fue galardonada con premios como el Amália Rodrigues, Carossone y 'In Honorem' de la Academia Charles Cros. Mísia fue una figura clave en la renovación del fado, un género tradicionalmente melancólico que ella revitalizó con nuevas perspectivas y sonidos menos convencionales. Su enfoque audaz y su talento la llevaron a ser reconocida tanto en Europa como en América Latina.
A lo largo de su carrera, Mísia colaboró con artistas de renombre como Maria João Pires, Isabel Huppert, María de Medeiros y María Bethânia. Su nombre artístico, 'Mísia', fue inspirado por Maria Zofia Olga Zenajda Godebska, musa del pintor Josep María Sert.