La salud es algo que todos damos por sentado, pero en realidad es lo más valioso que tenemos.
La vida de Irene Roozbayani es un ejemplo de esto. La reconocida maquillista e influencer había sido diagnosticada con cáncer de intestino en etapa cuatro en abril de este año. A pesar de su valiente batalla contra la enfermedad, finalmente perdió la vida a los 41 años. Su deceso ocurrió el pasado 7 de noviembre y fue confirmado a través de sus redes sociales.
"Irene fue una persona con una gran habilidad para el maquillaje y una personalidad tierna y cálida", según sus seguidores y admiradores en línea. Su destacada trayectoria en el mundo de la belleza la llevó a trabajar para prestigiosas marcas como Charlotte Tilbury y a colaborar con diseñadores de renombre, como Vivienne Westwood.
La familia de Irene compartió una emotiva y sentida publicación en su cuenta oficial de Instagram para compartir detalles de su último adiós. El funeral se llevará a cabo el 26 de noviembre a las 12:00 horas, donde amigos y familiares van a darse cita para celebrar la vida de la influencer. "Este será un momento para compartir historias, risas y amor, tal como a ella le hubiera gustado", según la publicación.
La vida de Irene Roozbayani es un ejemplo de la importancia de la salud y la valentía en la cara de la adversidad. Su legado vivirá en la memoria de sus seguidores y admiradores, y su influencia en el mundo de la belleza seguirá siendo recordada.
Algunos de los logros de Irene Roozbayani incluyen:
- Trabajar para prestigiosas marcas como Charlotte Tilbury
- Colaborar con diseñadores de renombre, como Vivienne Westwood
- Construir una carrera exitosa en el mundo del maquillaje
- Posicionar como una de las maquillistas más destacadas en su campo