La canción, interpretada por Cazzu, utiliza una metáfora poderosa: "la cueva". Pero ¿qué representa esta imagen? No es una cueva literal, sino un espacio emocional, un estado de vulnerabilidad y oscuridad. Esta imagen se utiliza para describir el estado del protagonista masculino en la historia.
La primera estrofa nos introduce a un personaje masculino descrito como "totalmente roto, totalmente oscuro, totalmente loco". La cantante, narradora de la historia, se presenta como una figura que intenta brindar ayuda, "lamer sus heridas y encender su sol", ofreciendo cuidado y apoyo. Sin embargo, la respuesta del hombre es solo egocentrismo: "solamente pensaste en vos", sentenciando el futuro de la relación desde el inicio.
El estribillo, repetitivo y contundente, es el eje de la canción: "¿Y qué vas a hacer? Cuando yo florezca y al fin deje de doler... volver, volver, volver, no se va a poder". Esta frase encapsula el sentimiento de incertidumbre y la inminente soledad del protagonista tras la partida de la cantante. La repetición refuerza el impacto de la separación, la imposibilidad del retorno.
La segunda estrofa profundiza en las causas de la ruptura. Se describe al protagonista como responsable de la situación, alguien que convirtió la relación en "una maldita parodia", destruyendo todo a su paso. Incluso su riqueza se presenta como un factor irrelevante: "con todo tu dinero comprarás el mundo entero", una frase que enfatiza su incapacidad para resolver sus propios problemas internos. La frase "sos tu propio prisionero" resume su autodestrucción.
La canción culmina con la idea de que el placer podría ser un sustituto superficial para la nostalgia, una forma de evitar afrontar el dolor de la pérdida: "cuando la nostalgia no la tapes con placer". Es una observación fría y objetiva sobre el proceso de superación, o más bien, la falta de ella, en el protagonista.
La estructura de la canción, con su narrativa lineal y la potencia de la metáfora principal, construye una historia concisa y emotiva, que sin sentimentalismos excesivos, expone las consecuencias de las acciones y la incapacidad para afrontar la propia responsabilidad.