La actriz describió ante el Tribunal Superior de California cómo "los eventos que rodearon nuestra ruptura dejaron cicatrices emocionales en toda la familia", según consta en los registros obtenidos por medios estadounidenses. Lo que comenzó como un idilio de película terminó convirtiéndose en una batalla legal interminable.
El principal punto de conflicto: Château Miraval, la propiedad vitivinícola de 1,000 hectáreas en el sur de Francia que adquirieron en 2008 y donde celebraron su boda en 2014. La finca representa mucho más que un activo económico:
- Fue el lugar donde Jolie pasó su embarazo
- El hogar al que llegaron los gemelos Knox y Vivienne después de nacer
- Escenario de fotografías familiares que dieron la vuelta al mundo
Jolie renunció voluntariamente a sus derechos sobre otras propiedades conyugales en Los Ángeles y Francia, sin recibir compensación económica, con la esperanza de agilizar el proceso. Sin embargo, la venta de su participación en Miraval al empresario ruso Yuri Shefler en 2021 desató la guerra legal actual.
Los papeles judiciales detallan sacrificios poco conocidos de la estrella de Maléfica:
- Tuvo que rentar viviendas temporales durante meses mientras reorganizaba su vida
- Dejó de trabajar durante dos años para priorizar la estabilidad emocional de sus hijos
- Rechazó pensiones alimenticias aunque eso significara aceptar un préstamo con intereses de su exesposo
