Nueva cepa de gripe aviar en ganado vacuno preocupa a expertos en salud pública
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La confirmación se produjo en Nevada, donde se detectó un nuevo tipo de virus H5N1, conocido como D1.1, en ganado vacuno. Este hallazgo es significativo, ya que se trata de una cepa diferente a la B3.13, que ha infectado a más de 950 hatos en 16 estados desde finales de 2023.
“Siempre pensé que una transmisión de ave a vaca era un evento muy raro. Parece que ese puede no ser el caso,” comentó Richard Webby, experto en influenza del Hospital de Investigación Infantil St. Jude. Esta declaración subraya la sorpresa de la comunidad científica ante la aparición de una segunda cepa.
La detección de la cepa D1.1 se realizó gracias a un programa de vigilancia implementado en diciembre. Se encontró en muestras de leche, demostrando la importancia de este tipo de monitoreo. “Ahora sabemos por qué es realmente importante hacer pruebas y continuar haciéndolas,” afirmó Angela Rasmussen, experta en virus de la Universidad de Saskatchewan.
El virus D1.1, según las autoridades, está directamente relacionado con la primera muerte en Estados Unidos atribuida a la influenza aviar. Un individuo en Louisiana falleció en enero tras presentar graves síntomas respiratorios después del contacto con aves silvestres y de traspatio. Además, una adolescente en Columbia Británica sufrió una enfermedad grave con meses de hospitalización a causa de una cepa similar, proveniente de aves de corral. Al menos 67 personas en Estados Unidos han resultado infectadas, principalmente trabajadores en contacto directo con ganado.
El Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (USDA) publicará la información genética y otros datos sobre la cepa D1.1 esta semana. Esto permitirá a los científicos determinar si la transmisión se produjo recientemente o si el virus ha estado circulando de forma inadvertida durante más tiempo.
“Si resulta que esto cruzó al ganado hace un par de meses, un par de meses es mucho tiempo para no detectarlo,” señala Michael Worobey, biólogo evolutivo de la Universidad de Arizona, quien enfatizó la urgencia de compartir información sobre un virus con el potencial de desencadenar una pandemia.
La investigación continuará para comprender mejor la propagación, la transmisión y el impacto potencial del virus D1.1. Se espera que los resultados de los análisis genéticos aporten información crucial para el desarrollo de estrategias de prevención y control, tanto para la salud humana como animal.