Elon Musk revela amenazas de muerte tras reunión con Donald Trump

Después de que el Presidente Donald Trump agradeciera a su gabinete, una voz se sobrepuso al murmullo general. Se trataba de Elon Musk, consejero presidencial, CEO de Tesla y SpaceX, quien mencionó, según se escucha en la grabación, las amenazas de muerte que él y sus empleados de DOGE reciben "diariamente". La sala se silenció por un instante ante la declaración de Musk, quien añadió: "Solo intento hacer lo correcto por el contribuyente estadounidense y el pueblo americano." El Presidente Trump respondió con un simple "Está bien," y las cámaras cesaron la grabación.
Este breve fragmento de video, que muestra a varios miembros del gabinete aparentemente ignorando las preocupaciones de Musk, ha generado una ola de reacciones en internet. Mientras algunos usuarios mostraron su apoyo al magnate, la mayoría fue implacable en sus críticas.
Las opiniones en redes sociales fueron variadas. Algunos comentarios se burlaron del multimillonario: "El hombre más rico del mundo también es el llorón más grande que conocerás", escribió un usuario. Otros fueron más directos: "¡A quién le importa!!", "Qué lástima", y un sarcástico "Mis pensamientos y oraciones".
Muchos criticaron el comportamiento online de Musk, sugiriendo que su actitud podría ser la causa de la hostilidad que recibe. Se le cuestionó su influencia gubernamental y la percepción de que capitaliza su posición: "Lo correcto para el contribuyente es dejar de recibir subsidios gubernamentales para Tesla, siendo la persona más rica del mundo", señaló un comentarista.
Las críticas se extendieron a las consecuencias económicas de las políticas impulsadas por DOGE. Una respuesta contundente apuntó: "Tal vez eso lo hará repensar las amenazas de muerte implícitas que está distribuyendo a quienes dependen de la Seguridad Social, SNAP, Medicare, Medicaid, etc."
La situación se complica aún más con los crecientes actos de protesta contra Tesla, incluyendo actos de vandalismo e incluso incendios premeditados. A pesar del apoyo federal, con la Fiscal General Pam Bondi investigando los ataques contra Tesla como "terrorismo", y el propio Presidente Trump siendo dueño de un Tesla, la inversión en la compañía se ha visto afectada. Incluso un inversionista inicial ha pedido la renuncia de Musk como CEO de Tesla.
El incidente deja al descubierto una compleja red de tensiones políticas y económicas, con un personaje tan influyente como Musk en el centro de la controversia.