Indignación en redes por precios y retrasos del Nintendo Switch 2: usuarios culpan a Trump

Hablamos de la Nintendo Switch 2, cuyo lanzamiento global está programado para el 5 de junio. El precio base, ya de por sí elevado en $449 dólares, ha generado expectativas mixtas entre los entusiastas. Sin embargo, la reciente decisión de Nintendo de posponer las preventas en Estados Unidos hasta nuevo aviso, ha desatado una tormenta perfecta de comentarios, principalmente dirigidos hacia una figura política en particular.
La razón principal de este cambio, según el comunicado oficial de Nintendo, es la necesidad de reevaluar el precio final debido al impacto de las nuevas tarifas impuestas por la administración del presidente Donald Trump. Esta decisión se produce apenas dos días después de que Trump anunciara un nuevo paquete de aranceles globales, que golpea particularmente fuerte a países como Vietnam y Camboya —donde Nintendo fabrica gran parte de su hardware— con tarifas del 46% y 49%, respectivamente. Este cambio de producción, cabe recordar, fue una respuesta a las políticas arancelarias de Trump durante su primer mandato.
En redes sociales, la indignación es palpable. Muchos usuarios culpan directamente a Trump, utilizando frases como "Gracias al peor presidente en la historia de EE. UU." o "Trump arruinando las cosas como siempre". La frustración se extiende incluso a aquellos que votaron por él, con comentarios como "Si eres un gamer estadounidense y votaste por Trump (o no votaste), la culpa del precio y el retraso de la Switch 2 es 100% tuya".
La incertidumbre se centra ahora en el precio final que tendrá la consola en Estados Unidos, y por extensión, en otros mercados. Algunos usuarios especulan que el precio podría superar fácilmente los $500 dólares, un aumento significativo que preocupa a muchos. Se escuchan comentarios como "Ahora costará mil millones de dólares, gracias, hombre anaranjado", reflejando la frustración generalizada.
Este incidente pone de manifiesto las consecuencias directas de las políticas proteccionistas en el ámbito del consumo cotidiano. Mientras los gamers esperan con impaciencia, una pregunta queda en el aire: ¿Cuáles serán las futuras repercusiones de esta "guerra comercial" en el precio de otros productos electrónicos?