Según el Servicio Meteorológico Nacional (NWS), el vórtice polar está enviando ráfagas de aire ártico hacia el noreste de Estados Unidos, afectando especialmente zonas rurales y suburbanas del estado. Condados como Onondaga, Madison y Broome podrían registrar temperaturas tan bajas como -1 °C, mientras que en áreas como Albany y Greene, los termómetros alcanzarían los -4 °C durante la madrugada.
¿Qué está pasando exactamente? Estos son los puntos clave:
- Daños a cultivos: La agricultura local está en riesgo, especialmente en regiones donde las heladas tempranas no son comunes.
- Infraestructura vulnerable: Tuberías y sistemas de riego podrían verse afectados por el congelamiento.
- Efecto "isla de calor": La ciudad de Nueva York escapa por ahora de las peores condiciones, gracias a la concentración urbana.
Aunque no se esperan nevadas en el corto plazo, los expertos advierten que esta ola de frío es solo el comienzo. Los registros históricos muestran que Rochester, Buffalo y Syracuse suelen recibir su primera helada entre octubre y noviembre, pero este año podría adelantarse.
Para los neoyorquinos, el mensaje es claro: prepararse para noches más frías de lo normal. Y para los agricultores, una advertencia aún más urgente: proteger cultivos sensibles antes de que sea demasiado tarde.
