Según la Secretaría de Seguridad Pública estatal, los migrantes se encontraban en condiciones de deshidratación y fatiga, sin haber consumido alimentos durante un tiempo considerable. La Fuerza Especial SWAT recibió el reporte después de una persecución a dos individuos que se identificaron como parte del grupo, y que al verse sorprendidos por la policía, emprendieron la huida.
La SSPE, respondiendo a la situación crítica del grupo, trasladó a los migrantes al Instituto Nacional de Migración. Entre ellos, 11 eran provenientes de Nepal, una cifra significativa que destaca la presencia de migrantes de Asia en México. Además, 10 migrantes eran de Guatemala, tres de Honduras, dos de Ecuador y uno de El Salvador.
La operación de rescate en el Hotel San Juan destaca la necesidad de atención humanitaria y el papel crucial que desempeña la policía en la protección de migrantes en situaciones de riesgo.