Beca Rita Cetina y Benito Juárez: ¿cuál te conviene y por qué no se pueden combinar?

Dos programas gubernamentales destacan en este panorama: la Beca Rita Cetina y la Beca Benito Juárez. Ambos buscan apoyar la educación, pero sus alcances son distintos, dirigidos a diferentes niveles educativos y con criterios de selección específicos. El detalle reside en comprender estas diferencias para saber si se puede acceder a ambas, o cuál es la más conveniente en cada etapa.
La Beca Rita Cetina, en su fase inicial de 2025, se centra en estudiantes de secundaria en escuelas públicas. Su objetivo es "garantizar que todos los niños, niñas y jóvenes de educación básica inscritos en escuelas públicas tengan acceso a un apoyo económico para promover su permanencia en la escuela." El apoyo económico para el 2025 consiste en $1,900 pesos bimestrales por familia con al menos un estudiante de secundaria, con un bono adicional de $700 pesos por cada hijo extra en secundaria dentro de la misma familia. El requisito principal es estar inscrito en una escuela pública de secundaria durante el ciclo escolar 2024-2025.
Por otro lado, la Beca Universal Benito Juárez se enfoca en estudiantes de educación media superior (preparatoria o bachillerato) en escuelas públicas. Su objetivo es "otorgar un apoyo económico a estudiantes de educación media superior inscritos en escuelas públicas para contribuir a su permanencia y conclusión de estudios." El monto de la beca es de $1,900 pesos bimestrales por estudiante. Un requisito importante es no recibir otra beca federal con el mismo fin, y se da prioridad a estudiantes de escuelas en localidades vulnerables.
Entonces, ¿se pueden recibir ambas becas simultáneamente? La respuesta es no. Dado que la Beca Rita Cetina está dirigida a secundaria y la Beca Benito Juárez a preparatoria, no es posible ser beneficiario de ambas al mismo tiempo. Sin embargo, un estudiante podría ser beneficiario de la Beca Rita Cetina durante la secundaria y posteriormente, aplicar para la Beca Benito Juárez al ingresar al bachillerato.
Entender las particularidades de cada programa permite a los estudiantes planificar su futuro académico con mayor precisión, aprovechando al máximo las oportunidades de apoyo económico disponibles.