Puerto Peñasco, Son
Resuenan hasta 20 a la vez, todas aglomeradas en un espacio de no más de 200 metros cuadrados, lo que hace prácticamente imposible escuchar con atención alguna pieza de música de banda sinaloense tocada, pero eso no es lo que importa, lo que importa es que las hasta 10 mil personas que se reúnen llegada la noche durante el periodo vacacional de Semana Santa quieren bailar, divertirse, hacer saber que son vacaciones y hay dinero para gastar.
El periodo vacacional de Semana Santa es más que la conmemoración anual cristiana de la pasión, muerte y resurrección de Cristo; es descansar del trabajo, disfrutar de las vacaciones y Peñasco ha sido el punto ideal para hacerlo, no por nada cada año las cifras finales ascienden hasta casi llegar a los 40 mil visitantes.
De esos visitantes, cientos de ellos son músicos, vienen exclusivamente a trabajar. Ataviados con trajes característicos e iguales a los de sus compañeros para identificarse, llegan en autobuses, un poco viejos pero que la hacen de transporte efectivo y apto para alojar a las 10, 15 o hasta 17 integrantes de la banda.
Los conjuntos de banda llegan provenientes de estados como Sinaloa, Chihuahua, Nayarit, Durango y hasta del lejano Zacatecas, muchas de ellas con una larga trayectoria viniendo a Peñasco a trabajar buscando ser contratada por algunos de los miles de turistas que buscan derrochar su dinero.
“El camino es largo y los gastos para llegar son muchos, pero Peñasco tiene ese potencial y ese turismo que paga bien, por lo mismo seguimos viniendo”, expone el clarinetista de una banda proveniente de Nayarit.
Desde días antes de comenzar el alto flujo de turistas, los autobuses ya se pueden ver estacionados en las calles de Peñasco, esperan que el resultado sea exitoso, pues no hay Semana Santa sin que un aventado agarre la banda, para que le siga otro y otro más, hasta que el ruido aturda perdiendo la armonía, pero no la alegría de tenerla y bailarla.
La primera parada es la playa, pues ahí es donde la gente comienza su día, su primera cerveza y su primer ánimo de “agarrar la banda”. El frío que ha hecho no amedrentan a las bandas, desde temprana hora ya visten sus trajes y comienzan a tocar sus instrumentos al son de canciones como “La Yaquesita”, “El Son de los Aguacates”, “El Sinaloense”, “El Niño Perdido”, entre otras muchas más.
Cuando comienza a llegar la tarde, es tiempo de cambiar de ubicación y tomar lugar en la explanada del malecón Fundadores, cuestión de esperar que se lleguen las 7-8 de la noche y la gente comienza a llegar y seguir con sus peticiones, “¡Que toque la banda!” se oye, una por una empiezan a ser contratadas y así comienza una noche más de capirotada de música de banda con gente bailando al son de 5 canciones a la vez.
De miércoles a domingo acontece este fenómeno de la temporada vacacional de Semana Santa, Puerto Peñasco vive este fenómeno, algo atractivo para el turista, tanto para quienes las contratan como para los que no, porque no siempre es necesario pagar por escuchar, ni mucho menos para bailar.
Por su parte el ayuntamiento permitirá bandas de música en el Malecón y áreas turísticas, pero se dará prioridad a grupos locales, se otorgarán primero los permisos a grupos locales y luego a los foráneos.
La dirección de Inspección y Vigilancia del Ayuntamiento estará a cargo del control de los permisos para la prestación de diversos servicios en el Malecón y las demás áreas turísticas, con la premisa de dar prioridad al trabajo de la gente de Puerto Peñasco.