Nogales, Az
Aseguran que pasaban más de una semana en el desierto para alertar la presencia policiaca.
Las autoridades arrestaron a un grupo de hombres que fueron contratados por cárteles mexicanos del narcotráfico para detectar la presencia de policías y alertar a los traficantes en el desierto de Arizona.
El arresto marca lo que las autoridades dicen es un problema persistente en el condado Pinal, que se ubica a 110 kilómetros (70 millas) al norte de la frontera entre México y Estados Unidos. La policía dice que el condado tiene una alta actividad de contrabandistas que viajan al norte desde dos condados de Arizona que se asientan justo en la frontera.
Los hombres usaban celulares, radios codificados, binoculares y otras tecnologías, y dijeron que pasaban más de una semana en el desierto cada vez trabajando como vigías. Tenían armas, vivían en colinas, montañas y cuevas, y alertaban a los contrabandistas de drogas y polleros cuando había policías cerca.
La policía del condado Pinal comenzó a investigar a los vigías en febrero después de detener a un hombre de 22 años por un asunto de tránsito. Ramón García conducía una camioneta en la que transportaba 272 kilogramos (600 libras) de alimentos y otras provisiones. Le dijo a la policía que le pagaron 4 mil dólares por recoger el vehículo en Chandler, un suburbio de Phoenix, y llevarlo al desierto.
En los meses subsiguientes, la policía del condado y agentes de la Patrulla Fronteriza efectuaron una investigación que condujo al arresto de siete presuntos vigías, tres de los cuales se han declarado culpables de asociación delictuosa para poseer marihuana con fines de venta. Los tres han sido sentenciados a dos años y medio en prisión.
García se declaró culpable de ayudar a una organización criminal.