MEXICO, DF
El torneo de futbol mexicano se mantiene como antes pese a las promesas.
Cuando resta sólo una fecha en el calendario regular del torneo Apertura mexicano ha quedado claro que, al menos por ahora, la nueva liga de futbol local sigue siendo la misma de temporadas pasadas con algunos brochazos de maquillaje que en nada cambiaron la esencia.
En julio pasado se anunció que la Federación Mexicana se separaba del torneo local, que ahora llevaría el nombre de Liga MX, en medio de promesas de cambios sustanciales que harían que la experiencia dentro y fueron de los estadios fuera mejor al producto anterior.
Eso no ha ocurrido.
Sobre la cancha aumentaron los empates. La temporada pasada, luego de 16 fechas, eran 40 y en el actual Apertura suman 49.
“Los empates son producto de la competitividad porque los entrenadores saben que son fundamentales todos los puntos”, dijo el ex seleccionador mexicano Manuel Lapuente. “Es una temporada muy corta y si te metes en un bache luego ya no da tiempo ni de levantarse”.
Además ha habido fechas como la novena y décima, donde se marcaron 33 goles combinados, lo que empató el récord a la menor cantidad en torneos cortos, que fue impuesta en las fechas 8 y 9 del Clausura de 2007.
Tras 16 fechas, el promedio de goles por partido es de apenas 2,47 y de mantenerse ese paso sería el peor desde que se instauraron los torneos cortos en México en 1996.
“Los equipos nos conformamos muy bien y por eso la competencia es mucho mayor”, dijo el volante de Cruz Azul, Israel Castro sobre los empates. “A mí en ese sentido creo que por eso se hace más parejo el torneo, sin embargo, creo que todos podemos dar más”.
Entre las novedades para esta temporada se revivió el torneo de Copa en el que participan equipos de primera y segunda división, pero las escuadras del máximo circuito se interesaron muy poco y la gran mayoría usó a sus reservas. El campeón fue Dorados de Sinaloa de la segunda división.