AUGUSTA, Ga
Sergio García y Marc Leishman arrancan en la punta del Masters de Augusta.
Sergio García podría haberse descartado a sí mismo demasiado pronto del Masters.
La última vez que se le vio recorriendo el campo de Augusta, el impetuoso español hablaba con tristeza de su mala suerte en este torneo y dijo que resultaba cada vez más evidente que nunca vestiría la chaqueta verde.
García igualó su mayor puntuación en el Masters el jueves, con 66, seis bajo par, para firmar una tarjeta sin bogeys y compartir el liderato con el australiano Marc Leishman. Y pese a ello no lució feliz del todo, aunque esta vez tuvo buenas razones. Le pegó tan bien a la pelota que su puntuación podría haber sido mucho mejor.
“A decir verdad, si hubiera logrado un par de los putts que estuvieron cerca de caer, probablemente habría estado siete u ocho bajo par hasta el hoyo 10”, dijo García. “Fue así de bueno”.
Una ronda de apertura relativamente amable resultó fácil para varios jugadores —incluso para un menor de edad.
El chino Guan Tianlang, de 14 años y el jugador más joven en competir en un major en 148 años, lució muy por encima de su edad y acertó un tiro de 4,5 metros (15 pies) en el hoyo 18 para cerrar una respetable ronda de 73 y una buena posibilidad de avanzar a siguiente ronda.
Pero, por supuesto, todos los ojos miraban a Tiger Woods, el superfavorito. Ya ha ganado tres títulos este año y recuperó el primer puesto en el escalafón del mundo.
Pero Woods no gana un título grande desde el 2008 y ya han pasado ocho largos años desde que conquistó su cuarta chaqueta verde en Augusta. Todavía le faltan cuatro para empatar el récord de Jack Nicklaus de 18 títulos grandes.
Con un inicio desordenado, incluyendo un disparo que derribó un vaso de cerveza de las manos de un espectador, Woods reordenó su juego y abrió con tarjeta de 70 mientras su novia y campeona olímpica de esquí, Lindsey Vonn, observó las acciones en un par de hoyos.
“Me siento cómodo con todo aspecto de mi juego”, afirmó. “Siento que mejoré y que me he hecho más consecuente”.
Unas tres horas antes de que Woods iniciara su participación, el torneo comenzó con disparos ceremoniales de tres leyendas del golf: Arnold Palmer de 83 años, Gary Player de 77 y Nicklaus de 73.