BOSTON, Mass
Está fuera desde el 25 de enero cuando Celtics jugó ante Halcones.
En sus primeros comentarios públicos tras someterse a una cirugía para reparar una lesión en su rodilla derecha, Rajon Rondo de los celtics de Boston le dijo a Hannah Storm, de ESPN, que es “frustrante” no estar en la cancha con sus compañeros pero debe aceptar la situación.
“Estoy en el lugar ahora en el que estoy OK con eso”, le dijo Rondo a Storm en una entrevista que saldrá al aire en ESPN2 a las 21 ET el venidero 18 de abril. “Sé que mi objetivo crucial es mantenerme saludable”.
Rondo se lesionó la rodilla el pasado 25 de enero contra los Halcones de Atlanta. No creyó que su lesión era seria en ese momento (“No sentí un ruido... pensé que podía jugar con esto”, le dijo a Storm) e intentó volver a jugar dos días después ante el Heat de Miami. Antes de ese partido, de todos modos, se dio cuenta de que algo estaba mal.
“Fue shockeante y frustrante”, dijo. “Quería jugar contra el Heat ese día, domingo, y pensé en hacerlo. Pero en 30 minutos hice mi ritual, mi rutina, me metí en la ducha y algo me decía que no estaba bien”.
Fue al hospital ese día y se sometió a una resonancia en la rodilla. En su regreso al TD Garcen, dijo que escuchó algo en la radio de que podía ser una lesión de gravedad.
“Fue como: ‘Tenemos los resultados’. No podía ser posible”, dijo.
Tuvo las noticias del equipo ni bien llegó al Garden. Un par de semanas después, el 12 de febrero, se sometió a cirugía en Florida. El Dr. James Andrews llevó adelante el procedimiento, y Rondo se mantuvo en Florida antes de iniciar la parte primaria de la rehabilitación.
Rondo llamó al régimen de rehabilitación “intenso” con ejercicios fundamentales para recuperar fuerza en la zona afectada por la lesión.
“Esto es un proceso de aprendizaje completo para mi pierna”, dijo Rondo. “Será bueno para mí, darle una chance a mi cuerpo de sanar y trabajar en cosas que no había hecho con mi cuerpo antes”.
El campo de entrenamiento empezará siete meses luego de que Rondo se sometió a cirugía para reparar la lesión. La recuperación normal de esta lesión es de 9 a 12 meses. Adrian Peterson, MVP de la NFL, necesitó al menos nueve meses para retornar de la lesión, pero el base Derrick Rose aún no volvió en los Toros de Chicago tras 11 meses luego de la cirugía. No hubo otro daño estructural encontrado en la rodilla de Rondo, lo que puede acelerar su retorno. De todos modos, el base de Boston no piensa en una vuelta ahora.
“Cuando me sometí a la operación, por tres o cuatro semanas nadie sabía cuando iba a regresar, o cuando iba a volver a jugar, querían que me tome una semana y ver el progreso desde allí”, le dijo a Storm. “El cuerpo de cada persona es diferente. Todos juegan de manera distinta. Y una lesión como esta varía”.
¿Hay algo que le de miedo a Rondo acerca de volver de una operación de ligamentos cruzados?
“Que me suceda de nuevo”, dijo. “Más allá de eso, no”.