Jueza de caso Maradona: juicio suspendido por posible falta de imparcialidad

El foco se centra en la jueza Julieta Makintach, integrante del Tribunal Oral y Criminal de San Isidro, en las afueras de Buenos Aires. La fiscalía y los abogados defensores de varios imputados solicitaron la suspensión del juicio, argumentando una posible falta de imparcialidad por parte de la magistrada.
¿El motivo de la controversia? La presunta participación de la jueza en la producción de un documental sobre las audiencias judiciales del caso Maradona. Se alega que dos camarógrafos, sin la debida autorización, filmaron escenas dentro de la sala, lo que viola el reglamento y el derecho a la privacidad del proceso. Este hecho, junto a la supuesta vinculación de Makintach con la productora, ha generado un profundo malestar. “La situación compromete el prestigio del poder judicial”, afirmó el fiscal Patricio Ferrari al justificar la solicitud de suspensión.
La jueza Makintach, por su parte, ha negado las acusaciones, defendiendo su honor y su imparcialidad. “Voy a dar las explicaciones del caso…espero que lleguen a manos de todos antes de que pueda contestar una nueva vista en la próxima audiencia”, declaró. Sin embargo, también aclaró que estaría dispuesta a apartarse del caso si se presentaran pruebas contundentes que demostraran su falta de objetividad.
La suspensión del juicio, aprobada por el tribunal, se extenderá hasta el 27 de mayo. En ese lapso, se investigará a fondo la situación de la jueza y su posible relación con la producción del documental. Mientras tanto, los siete profesionales de la salud acusados –Leopoldo Luque (médico personal de Maradona), la psiquiatra Agustina Cosachov, el psicólogo Carlos Díaz, las médicas Nancy Forlini y Pedro Di Spagna, Mariano Perroni (representante de la empresa de enfermería) y el enfermero Ricardo Almirón– esperan con incertidumbre la resolución de este conflicto.
Estos profesionales son acusados de homicidio simple por dolo eventual, delito que podría acarrear una pena de hasta 25 años de prisión. La acusación se basa en la presunta negligencia en el cuidado de Maradona durante su internación domiciliaria tras una cirugía para un hematoma subdural, ocurrida en noviembre de 2020. El próximo 27 de mayo se definirá si la jueza Makintach continuará en el proceso o si se nombrará a un nuevo juez para continuar con las audiencias. La posibilidad de volver a citar a los casi cincuenta testigos ya escuchados también se encuentra sobre la mesa.