Kate del Castillo la soltería, su mejor estado

MÉXICO, DF.

Desde que la protagonista de la cinta ‘Visitantes’ vive sin pareja su vida ha cambiado radicalmente.
Después de dos divorcios, la actriz mexicana Kate del Castillo se siente mejor que nunca. Sus ojos lo reflejan, su actitud y apariencia hablan de una mujer plena que necesitaba vivir su soltería. Aunque ni ella misma se lo explica, la protagonista de la cinta terrorífica Visitantes aseguró que vivir sin pareja ahora la hace más feliz.

—Kate, ¿feliz de volver a México?
—Sí, muy contenta de estar aquí aunque sea unos días, de pisa y corre, pero siempre es bueno volver a ver a mi gente, a mi familia, a mis amigos.
—Platícanos un poco de este reto al que te enfrentaste con la película Visitantes.
—Fue la primera vez que hice terror. Sí, fue un reto muy grande. Me costó mucho trabajo encontrar el tono, etc; no fue nada fácil. La historia es muy buena, no es una historia de sangre ni de ese tipo de terror, que a mí no me gusta mucho, es una historia muy bonita, a mí se me hace una historia bastante bonita, no la veo tanto como de terror, la verdad. De hecho cuando la leí no la vi como tal.

—¿No la calificas como tal?
—Leyéndola no; cuando yo la leí mi percepción no fue así por el trasfondo que tiene y por lo que es. Sí da miedo, pero para mí es como más suspenso, aunque espero que no me regañen (risas) porque no sé mucho de los géneros, pero para mi punto de vista es suspenso.
—Ana, tu personaje, es una mujer escéptica ante una posible aparición de espíritus, ¿tú eres igual?
—Sí, yo soy demasiada escéptica, soy muy pragmática, muy práctica; tal cual como Ana, pues es una mujer de ciencia, doctora. Todo tiene una explicación científica hasta que su mundo se le empieza a desmoronar y es cuando empieza a entender que no entiende (risas), que no todo tiene explicación y es lo mismo que yo siento. Soy escéptica pero estoy abierta a reconocer que hay energías y que pueden suceder cosas que nadie se las explica.
—Hablando de energías, sé que Aurora Papile y tú vivieron algo paranormal en los sets de la película, específicamente en una escena de baño...
—Sí, sucedieron cosas que en el momento nos espantamos un poco, pero yo misma decía: obvio es porque ya nos estamos obsesionando y más porque estamos haciendo una película de terror, ¡qué jalada! Pero de repente sí pasaban cosas que ya no nos explicábamos, pero fue porque nos abrimos un poco y llamas esas cosas o te vuelves un poco más susceptible o más sensible a cosas raras. También había un montón de moscas todo el tiempo. La película gira en torno a moscas, ¡imagínate!

—Trabajar al lado de Raúl Méndez y Aurora Papile, a quien conociste en esta historia y que hoy en día hiciste una amistad muy cercana con ella, ¿te alivianaron un poco más el miedo no?
—Sí, con Aurora me hice muy amiga, no sabía que también vivía en Los Ángeles y es padrísimo porque nos juntamos, y con Raúl que es un actor que admiro mucho y quiero. Por supuesto que se volvió más ligero el terror al lado de este gran cast.

—¿Apoyar una ópera prima de Acán Coen, es gratificante?
—Obvio, además los cortos que vi de él me encantaron. Es un tipo muy profesional, inteligente y talentoso.

—¿Nunca dudaste de hacerla?
—No, fíjate que me cautivó desde un principio, pero sí nos tardamos un poco en coincidir por fechas mías y eso pero no dudé porque vi una película serie, grande; todo lo que me plantearon me encantó, la gente de al alrededor es gente de cine y que sabe hacer cine, por eso me animé. Sé que estuve en excelentes manos. Fue una muy bonita experiencia. Lo volvería a hacer una y otra vez.

Siempre es padre volver a hacer cine en tu país, ¿cierto?
—Justo por esa razón fue que me animé a hacerla. Es una película cien por ciento mexicana y rodada en México. Que me hagan hacer cine en mi país me emociona mucho porque eso casi no sucede.

—¿O sea que casi no te llaman para filmar aquí?, ¿por qué?
—No sé. Tal vez piensan que estoy allá (Estados Unidos), o tal vez piensan que no voy a querer, o tal vez piensan que tengo mucho nombre como telenovelera.

—¿Qué hay del año que se fue?
—Fue un año de mucho trabajo, lo mismo dije de 2013 pero la verdad es que así fue. Estoy muy feliz, no tengo nada de que quejarme. Me siento muy bien tanto personalmente como profesionalmente. Estoy en una etapa bien padre, bien contenta, bien tranquila y divirtiéndome muchísimo.

—¿Y de rubia más no?
—(Risas) sí, de rubia me divierto más.
—¿Si es cierto eso?
—Sí, yo te lo confirmo (risas).

—¿No te sientes rara con este nuevo look?
—Claro me veo al espejo todavía y digo: ¡Uyyy! pero a todo uno se acostumbra. Sé que sólo es para un personaje y sé también que volveré a milook después, a mi estado normal.

—¿Es la primera vez que te lo tiñes?
—Sí y me siento rarísima, pero fue para un personaje, mientras sea por trabajo no tengo problema.

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