Ryan Reynolds toma el control
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El Diario de SonoraRyan Reynolds, aquel joven canadiense que empezó su carrera a principios de los noventa y al que se le vio como novio de Melissa Joan Hart en la cinta Sabrina, la bruja adolescente, se ha convertido en uno de los actores más queridos, así como mejor pagados de Hollywood (tan sólo por detrás de Dwayne Johnson, quien ocupa el primer lugar). Su fortuna asciende, según Forbes, a poco más de 150 millones de dólares. Este actor, al que se ubica como el irreverente Deadpool, comenzó su carrera hace exactamente 30 años, pensando que su mayor éxito sería lograr trabajar como actor secundario en una sitcom (comedia de situación).
“¡Wow! Treinta años en esta industria es algo destacable y no lo tomo como una carrera asegurada. He sido un actor que ha trabajado muy duro y para mí ser parte de todo esto es como si me hubiera sacado la lotería. Me siento muy afortunado al poder protagonizar historias y debo decir que yo no fui ese tipo de actores a los que la fama les llegó como un cohete espacial que los pone en el estrellato. El lugar que tengo hoy en día ha sido parte de un proceso lento. Nunca tuve expectativas, todo se fue dando, me dejé llevar y simplemente me sentía agradecido de poder tener trabajo. Cuando empecé mi sueño más salvaje y alocado era llegar a ser actor de reparto en una sitcom, así que nunca tuve grandes expectativas sobre la fama”, contó Ryan Reynolds en entrevista vía Zoom con Excélsior.
Además de celebrar este 2021 tres décadas en la industria hollywoodense, el también protagonista de La propuesta, junto a Sandra Bullock, cumplirá 45 años el próximo 23 de octubre y aunque aún no ha pensado en cómo lo celebrará, asegura que estará con sus tres hijas, así como con su mujer, la también actriz Blake Lively, con quien lleva 10 años y con quien entretiene a sus seguidores con todas las historias e imágenes que suben a sus redes sociales, molestándose mutuamente o haciéndose bromas.
“En serio, no lo había pensado hasta que sacaste el tema, no había pensado en mi cumpleaños, pero seguro estaré con mi familia”, contó Ryan Reynolds con una gran sonrisa.
Hace unos días Blake Lively y Ryan Reynolds, considerados como una de las parejas más sólidas de Hollywood, fueron el deleite de los medios de comunicación al desfilar en Los Ángeles por la alfombra roja de Free Guy. Tomando el control, el más reciente filme del actor que se estrenará este jueves en las salas de México.
En esta película, dirigida por el también canadiense Shawn Levy (Stranger Things), Ryan Reynolds se adentra en el mundo de los videojuegos al interpretar a un personaje secundario o un NPC (Non Playable Character, por sus siglas en inglés) que rompe el algoritmo, toma conciencia y se empieza a posicionar como uno de los personajes favoritos del videojuego.
“Para empezar, me atrajo la idea de trabajar con Shawn Levy, quien inmediatamente dijo sí a la película y con quien yo tenía muchas ganas de hacer algo. La otra parte que me gustó del proyecto fue el poder hacer algo original, algo que no estuviera basado en un cómic o que fuera parte de algo ya hecho. Queríamos traer una idea original, algo que es un privilegio hoy en día en mi industria y créeme que me gusta hacer películas basadas en los cómics, sin embargo, ser parte de algo así es muy especial”, relató Reynolds.
En Free Guy. Tomando el control, Reynolds le da vida a Guy, un cajero de banco que al ser parte de un videojuego realiza todos los días y a la misma hora las mismas actividades, hasta que al conocer a una mujer, se cuestiona una serie de cosas y rompe patrones de conducta.
“Además de entretener y divertir, Free Guy tiene un mensaje muy claro: que la vida te puede dar muchas posibilidades, que es necesario que salgas de las sombras, que te sientas útil y que tomes el control de tu vida”, comentó Reynolds, quien en todo momento se mostró amable y centrado.
Ante la pregunta de si recuerda algún momento o secuencia que más le haya gustado del filme que está plagado de efectos especiales, ya que parte de la trama se desarrolla dentro de un videojuego, Reynolds rememora cuando se enfrenta a una versión más desarrollada, bronceada, musculosa y de cabello rubio.
“La escena que más me gusta del filme es cuando se enfrente a este tipo que tiene una musculatura enorme. Fue muy divertido hacer esa escena, realmente es muy divertida. Shawn (director) y yo estábamos en mi sala antes de empezar al filmar y coincidimos en que teníamos que ponerle a Guy algo realmente fuerte con lo que tuviera que pelear y llegamos a la conclusión en que teníamos que hacer un personaje sumamente ridículo: una versión mía gigante, muy bronceado, con dientes extra blancos y con las puntas del cabello rubias… Creo que cuando tenía 18 años llegué a tener ese look, lo digo con vergüenza, pero pues así creamos a este personaje”, contó muy divertido Ryan Reynolds.
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