Uno de los casos más comentados en los últimos años es el de Lu, un dúo formado por Paty Cantú y Mario Sandoval, dos jóvenes talentosos de Jalisco. La historia de Lu se remonta a 2004, cuando ambos decidieron unir sus fuerzas para crear un proyecto que prometía revolucionar la música pop en México. Su éxito fue inmediato, con canciones como “La vida después de ti” y “Duele” conquistando al público mexicano. Sin embargo, detrás del brillo de la fama se escondía una realidad compleja que llevó a la disolución del grupo en 2007.
En una entrevista reciente con el periodista Gustavo Adolfo Infante, Paty Cantú habló sobre su experiencia en Lu, revelando las dificultades que llevaron a su separación. La cantante explicó que, aunque su proyecto musical prometía grandes éxitos, las diferencias creativas y los roces constantes entre ambos se convirtieron en un obstáculo insalvable. “Realmente no teníamos la misma forma de ver nada”, explicó Paty. La búsqueda de control creativo por parte de Mario generó tensiones que se intensificaron con el tiempo. “Comencé a querer crecer y eso llevó a discusiones muy dañinas para mi salud mental”, agregó Paty.
La situación se agravó cuando Mario comenzó a criticar la vida personal de Paty, llegando a insultarla con comentarios hirientes. “Me decía: ‘es porque creen que eres una zorra’, pero con una palabra peor”, recordó Paty con tristeza. Las diferencias en sus rutinas de trabajo también contribuyeron a la crisis. Paty se levantaba a las 7 de la mañana para entrenar y prepararse para las grabaciones, mientras que Mario prefería un estilo de vida más nocturno.
El punto de ruptura llegó cuando Mario envió un correo a la disquera pidiendo que Paty ya no participara en la escritura de las canciones ni en las decisiones creativas. "Le preguntaron si quería que fuera su corista y él respondió que sí", dijo Paty con decepción. La cantante fue despojada de su voz dentro del grupo, lo que marcó el fin del proyecto.
A pesar del dolor que le causó la separación, Paty Cantú ha encontrado la fuerza para seguir adelante. En su mensaje final a Mario, le deseó lo mejor, pero también agradeció que fuera él quien pusiera fin al proyecto. "El proyecto lo terminó él y no yo", afirmó, demostrando su resiliencia y su deseo de priorizar su bienestar. Hoy en día, Paty Cantú ha florecido como solista, cosechando éxitos y mostrando su talento al mundo. La historia del grupo Lu, aunque llena de conflictos, nos recuerda que siempre hay que buscar el crecimiento personal, incluso en medio de la adversidad.