Este fin de semana, esa familia recibió una noticia devastadora: la muerte de Casey Chaos, a la temprana edad de 59 años. El fundador de Cleopatra Records, Brian Perera, anunció el fallecimiento a través de una publicación en Instagram, expresando su profundo pesar y recordando a Casey no solo como un músico extraordinario, sino como alguien que "verdaderamente vivía y respiraba el estilo de vida punk".
Karim Chmielnski, cuyo nombre artístico era Casey Chaos, nació el 9 de octubre de 1965 en Trenton, Nueva York, y creció en Melbourne, Florida. Su historia, lejos de ser una trayectoria lineal, fue una aventura en sí misma. Desde sus inicios como skater profesional a los 10 años, donde realizó giras internacionales, hasta su incursión en el mundo de la música, su vida estuvo marcada por la energía y la pasión.
Su amistad con Duane Peters, un reconocido skater, lo introdujo al mundo de Black Flag en 1982, un hito que cambió el rumbo de su vida. De ahí surgió la banda Casey and the Skate Punx, que luego se transformaría en Disorderly Conduct, y finalmente, en Amen, la agrupación con la que alcanzaría la mayor fama.
Con Amen, Chaos grabó cuatro álbumes de estudio:
- Slave (1994)
- Amen (1999)
- We Have Come for Your Parents (2000)
- Death Before Musick (2004)
Las redes sociales se han llenado de mensajes de despedida, desde colegas como el baterista Roy Mayorga, quien lo describió como "un absoluto ícono y subestimado como artista", hasta figuras como Matt Pinfield, ex presentador de MTV. Incluso periodistas como Sammy Jones compartieron sus recuerdos de largas conversaciones con el músico, resaltando su personalidad profunda y carismática. La partida de Casey Chaos deja un vacío en la escena musical, pero su legado y su espíritu punk seguirán resonando en las generaciones futuras.