De idea a fenómeno global: La historia secreta de 'Wicked', película nominada al Oscar
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El autor Gregory Maguire, un nombre que quizás no te resuene de inmediato, pero que está detrás de una historia que sí conoces: Wicked. Su trayectoria, lejos de ser un camino lineal al éxito, es un ejemplo de perseverancia y una mirada profunda a la naturaleza del mal.
En la década de 1990, Maguire, un respetado autor infantil con “buenas críticas, pero no buenas ventas”, buscaba un nuevo rumbo. Después de años dedicados a la literatura infantil y a la educación, decidió explorar la escritura para adultos. Su objetivo era ambicioso: explorar el concepto del mal, pero no de forma abstracta, sino a través de una trama que atrapara al público mundialmente.
La inspiración surgió, inesperadamente, de un clásico: “El mago de Oz”. Maguire, recordando sus juegos infantiles reinterpretando la historia, tuvo una epifanía: “¡Se conocen! ¡Se han cruzado antes! ¡Iban juntas a la escuela!”, pensó sobre la Bruja Mala del Oeste y Glinda. De esta simple idea, surgió Elphaba y Glinda, personajes centrales de su novela "Wicked: Memorias de una bruja mala".
Su novela, publicada en 1995, no fue un éxito inmediato, pero creció de forma orgánica, convirtiéndose en un fenómeno a través del boca a boca. La adaptación al musical, y posteriormente a la película protagonizada por Cynthia Erivo y Ariana Grande, catapultó la historia a la fama mundial. La película, nominada al Oscar, presenta una versión diferente a la novela, centrándose más en la amistad entre Elphaba y Glinda, y suavizando algunos aspectos más oscuros del libro.
Pero ¿qué hace a Wicked tan cautivadora? Dana Fox, co-guionista de la película, destaca la genialidad de Maguire: su capacidad de cuestionar las suposiciones preconcebidas. “La brillantez del libro de Maguire es que planteó esa misma pregunta: ¿Por qué es malvada la bruja verde?”.
La relevancia de Wicked, según Fox, radica en su capacidad para reflejar la marginación social. "Ciertas personas siguen siendo marginadas en nuestra sociedad, o se las hace ser los malos para que otras personas puedan ganar poder". La historia de Elphaba, desde la autodestrucción hasta la autoaceptación, resuena profundamente en el público, porque “no hace falta tener la piel verde para saber cómo se siente eso”.
El impacto del trágico asesinato de James Bulger en 1993, un suceso que cuestionó profundamente a Maguire sobre la naturaleza del mal, se convirtió en un catalizador para la escritura de su obra maestra. La historia de Wicked, más allá de su atractivo superficial, explora las complejidades del mal, la marginación y la búsqueda de la identidad, elementos que la mantienen vigente y relevante décadas después de su creación.