Tom Holland revela la incomodidad extrema de usar el traje de Spider-Man

En una entrevista reciente con Esquire, el actor británico confesó algo que seguramente muchos colegas en el género han callado: "Definitivamente se pone mohoso", admitió entre risas al hablar del traje del Hombre Araña. La razón es tan simple como incómoda: el sudor acumulado durante jornadas de hasta 11 horas de rodaje convierte el icónico atuendo en un problema de higiene.

Los datos que pocos sabían:

• El estudio le proporciona un traje nuevo cada dos semanas debido al deterioro por humedad
• En filmaciones anteriores llegó a pasar casi medio día sin poder quitárselo para ir al baño
• La situación fue tan extrema que requirió intervención familiar

No es la primera vez que Holland habla sobre los sacrificios físicos del papel. Durante el rodaje de Spider-Man: Homecoming, el actor tuvo que recurrir a su madre para sobrellevar la presión: "Llamé a mi mamá y le dije: 'La estoy pasando muy mal, estoy trabajando todos los días, y como uso el traje, no puedo ir al baño'", recordó en entrevistas pasadas.

Más allá de la anécdota graciosa, la revelación muestra el lado menos brillante de interpretar a un superhéroe en Hollywood. Mientras el público disfruta de las acrobacias en pantalla, pocos imaginan que el actor detrás de la máscara lidia con problemas que van desde infecciones cutáneas hasta deshidratación por las restrictivas condiciones de trabajo.

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