La supercomputadora Watson cocina platillos en un festival
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El Diario de SonoraMéxico, DF
IBM y una pareja de chefs sirven platillos a los asistentes al festival basados en su elección.
Toma una computadora grande y legendaria, una red social y un equipo de chefs aventureros, después mézclalos dentro de un camión de comida. Sírvele los resultados a una fila de asistentes a un festival para probar la primera comida fusión hombre-máquina del mundo.
Se llama “cocina cognitiva” y aquí está cómo funciona: los usuarios de Twitter utilizan el hashtag #ibmfoodtruck y los votantes en el sitio web de IBM seleccionan un platillo familiar como kebabs o pescado y papas fritas. La supercomputadora Watson de IBM (mejor conocida para las personas que no saben de tecnología por su aparición en el programa de televisión Jeopardy) crea una larga lista de ocho o más ingredientes basados en el análisis químico de sus compuestos de sabor. Finalmente, nace el platillo, preparado y servido desde un camión de comida por un equipo de cocineros liderado por Michael Laiskonis del Instituto de Educación Culinaria de Nueva York en Estados Unidos.
Los resultados deleitan a los entusiastas a la comida y la tecnología en el Festival South by Southwest en Austin, Texas, Estados Unidos, y sorprenden a los chefs y programadores. Muchos de los ingredientes que Watson escoge no se encuentran juntos en cualquier receta convencional; por ejemplo las fresas en un kebab vietnamita de manzanas poco ortodoxo, o una musaca con panza de cerdo y eneldo.
“Queremos descubrir esas cosas que nunca pensamos antes”, dijo el chef Laiskonis. “Como humanos, podemos identificar las afinidades de quizá dos o tres ingredientes, pero más allá de eso es difícil para nosotros comprender todas las asociaciones sutiles”.
Para Florian Pinel, un ingeniero de software en el grupo Watson de IBM, el proyecto es más que solo un truco de fiesta para divertir a los entusiastas a la comida. “Hace aproximadamente dos años analizamos lo que Watson podía hacer, y era muy bueno ayudando a las personas a tomar decisiones, al razonar sobre el mundo como es. Pero pensamos que sería interesante ver si también podía ser creativo y ayudar a las personas a ser creativas también”, dijo Pinel.
“Intentamos descifrar qué esperan que haga el sistema por ellos en sus vidas diarias, y después veremos a dónde nos lleva”, continuó.
De acuerdo con Pinel, ese destino podría estar más allá de la cocina.
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