El Diario de SonoraMiguel de 22 años prendió fuego a la vivienda de sus familiares "porque no soportaba que fueran tan felices y él no"
César Barragán
Nogales
Porque no podía verlos felices, un joven prendió fuego a la vivienda de su primo y la esposa de éste mientras dormían con intención de matarlos y, al ver que fracasó, se encerró en la vivienda en llamas y pereció.
El fallecido fue identificado por las autoridades como Miguel Ángel V., de 22 años, oriundo de esta ciudad, quien murió a consecuencia de la inhalación de monóxido de carbono y quemaduras.
Este hecho se documentó alrededor de las 03:20 horas, cuando se reportó al C5 el conato de incendio al interior del domicilio marcado con el número 277 de la calle Puerto Tampico en la colonia Embarcadero.
Al lugar acudieron elementos de la Policía Municipal y efectivos del cuerpo de bomberos Gustavo L. Manríquez, quienes al llegar al sitio observaron que un grupo de vecinos sofocaban las llamas auxiliados con mangueras y cubetas con agua, señalando que al interior del inmueble había una persona.
En el sitio, el de nombre Jesús Guillermo V., de 31 años de edad, relató a los oficiales que momentos antes se encontraba en su casa en compañía de su esposa Elsa y de su primo Miguel, al cual le brindaban hospedaje desde hace dos días por problemas familiares.
Relató que, siendo las 02:00 horas, él y su esposa se fueron a su recámara a dormir, indicándole a Miguel que se quedara en el sofá, cuando de pronto minutos después de las 03:00 percibieron un fuerte olor a quemado.
Al levantarse vieron que los sillones estaban quemándose y la sala estaba envuelta en llamas, por lo decidieron salir de la casa por una de las ventanas del baño, siendo en ese momento que abrió la puerta principal para auxiliar a su primo Miguel y sofocar el fuego.
Sin embargo fue sorprendido por su familiar, quien se le abalanzó con un cuchillo intentando herirlo, por lo que como pudo lo esquivó.
El afectado narró que su primo le dijo que él había provocado el incendio pues quería que ellos se quemaran dentro, pues no soportaba que fueran tan felices y él no.
Al ver que llegaban las autoridades, el agresor se introdujo a la casa en llamas y se encerró bajo llave en la recámara donde colocó un mueble para evitar que la abrieran, ante el intento de las autoridades por rescatarlo, éste les gritó que lo dejara en paz ya que se quitaría la vida.
A la llegada de los bomberos finalmente se logró controlar el fuego y al revisar el interior del inmueble encontraron el cuerpo sin vida de Miguel, el cual estaba tirado en el suelo y presentaba múltiples quemaduras en todo el cuerpo.
Por tal motivo el personal de la Fiscalía General de Justicia ordenó el levantamiento del cuerpo, siendo trasladado a una funeraria local, quedando el caso a disposición del Agente Segundo del Ministerio Público.
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