Estambul.
Una persona atacó a los asistentes de una discoteca matando a 39 y dejando a 69 heridos.
La policía turca detuvo en Estambul a 12 personas por su presunta implicación en el atentado en el club ‘Reina’, en el que murieron 39 personas y que fue reivindicado por el grupo terrorista Estado Islámico (EI), informa el diario HaberTürk.
Según el rotativo, los sospechosos fueron trasladados a la sede central de la policía de Estambul, mientras continúa la búsqueda del autor de la masacre.
El viceprimer ministro de Turquía, Numan Kurtulmus, dijo hoy que el Gobierno tiene pistas sobre huellas dactilares y apariencia del sospechoso y que esperan determinar su identidad.
El ataque fue perpetrado a las 01:30 en la exclusiva discoteca, situada en la orilla europea del río Bósforo, donde varios cientos de personas festejaban la llegada del Año Nuevo.
Además de las 39 personas muertas, la mayoría de ellas extranjeras, otras 69 resultaron heridas, algunas de ellas de gravedad.
‘LLUVIA’ DE BALAS
El atacante descargó 180 balas antes de abandonar su arma en el local.
Según el diario HaberTürk, los expertos deducen del hecho de que haya descargado 180 balas que llegó a cambiar seis veces de cartucho.
Presuntamente, el atacante llegó al barrio de Örtakoy en taxi y caminó cuatro minutos hasta el club, donde abrió fuego contra un guardia jurado para poder acceder al recinto.
En medio del caos y pánico que se desató en el club, el autor dejó el arma y su chaqueta.