BOGOTÁ
El presidente Juan Manuel Santos pidió el domingo a los colombianos que tengan serenidad para no permitir que los extremistas frenen los esfuerzos de paz tras la detonación de una bomba casera en un popular centro comercial de la capital colombiana, que dejó tres mujeres fallecidas, entre ellas una voluntaria francesa de 23 años.
Santos anunció una recompensa de 100 millones de pesos (unos 35 mil dólares) para quienes entreguen información que permita dar con los responsables del ataque ocurrido en la víspera del Día del Padre.
La detonación se produjo en horas de la tarde del sábado en un baño público del segundo piso del centro comercial Andino, en una próspera zona comercial y turística del norte de Bogotá. Nueve personas resultaron heridas.
Santos se refirió a la larga historia de Colombia de combatir exitosamente la violencia provocada por traficantes de drogas y el extremismo político, afirmando que el último ataque no descarrilará los esfuerzos de paz que ya resultaron en un acuerdo de paz alcanzado a finales del año pasado con el principal movimiento guerrillero del país, las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia.
Los colombianos pueden tener la seguridad de que “no vamos a permitir que lo logrado hasta ahora sea frenado por un puñado de extremistas, de cobardes o de quienes no quieren la reconciliación del pueblo colombiano”, aseguró el gobernante luego de un encuentro con asesores de seguridad.
El ataque hizo que la atención se centrara inicialmente en el Ejército de Liberación Nacional, el último grupo rebelde activo en Colombia. El ELN ha realizado una oleada de ataques recientemente en Bogotá, pero sus líderes negaron participación alguna en la explosión del sábado.