Andrew Do, supervisor del Primer Distrito de Orange County, ha acordado declararse culpable de conspiración para cometer soborno, un acto que ha generado controversia y ha puesto en tela de juicio la integridad del sistema político local.
El caso surge de una investigación de larga duración que reveló un supuesto uso indebido de fondos públicos destinados a programas de asistencia durante la pandemia de COVID-19. La investigación se centró en la organización sin fines de lucro Viet America Society, la cual recibió millones de dólares para alimentar a personas mayores y discapacitadas. Sin embargo, las autoridades alegan que la organización utilizó gran parte de estos fondos para adquirir bienes raíces, desviándolos de su propósito original.
Do, quien públicamente promovió un programa de comidas para sus electores, habría firmado un acuerdo para declararse culpable de conspiración para cometer soborno en relación con este esquema. De acuerdo con el fiscal federal Martin Estrada, solo un 15% de los más de $9 millones canalizados a Viet America Society se destinaron realmente a la alimentación de los necesitados. Como parte del acuerdo, Do ha renunciado a su cargo como supervisor y ha aceptado la confiscación de dos propiedades en Orange County, así como de $2.4 millones que fueron incautados durante la investigación.
El caso ha desatado una ola de indignación entre la comunidad de Orange County, con muchos ciudadanos cuestionando la falta de transparencia y la posible complicidad de otros funcionarios en este esquema de corrupción. Katrina Foley, supervisora del Condado de Orange, expresó su disgusto por el "nivel asombroso de corrupción, codicia y engaño descrito en las acusaciones federales".
A pesar de que la esposa de Do, una jueza del Condado de Orange, no ha sido acusada formalmente, la investigación continúa y aún no se ha descartado la posibilidad de que se descubran más implicaciones en este caso.