Un tiroteo desde un vehículo, un evento que se ha vuelto demasiado común en las calles de Chicago, dejó un joven sin vida y a otro luchando por sobrevivir. La policía de Chicago, en un comunicado lacónico, confirmó el incidente. Ocurrió poco después de la medianoche, en el estacionamiento del puerto, una zona popular para residentes y visitantes por igual. Las dos víctimas, ambos de 22 años, se encontraban en el estacionamiento cuando una camioneta SUV de color oscuro se aproximó. Un individuo dentro del vehículo abrió fuego, impactando a ambos jóvenes.
Edher Yaioluna, de 22 años, recibió un disparo en la cabeza que le quitó la vida en el lugar. Su amigo, también de 22 años, sufrió heridas de bala en el brazo izquierdo y el pecho. Fue trasladado al hospital en estado crítico, luchando por sobrevivir a la violencia que los sorprendió en la noche.
Las autoridades, hasta el momento, no han podido establecer las causas del tiroteo. No se han realizado arrestos y la investigación sigue en curso.
La ciudad, una vez más, se enfrenta a la brutalidad de la violencia armada, un fantasma que parece perseguirla sin descanso.