El nerviosismo se apoderó de Nueva York este viernes por la mañana. La ciudad se prepara para uno de los eventos deportivos más importantes del año, el Maratón de Nueva York, y la seguridad se ha intensificado al máximo. Sin embargo, un incidente inesperado en Central Park encendió las alarmas, desatando una respuesta policial inmediata.
Un objeto sospechoso fue encontrado cerca de la meta del maratón, en una mesa de picnic a las 9:24 a.m. en West 68th Street y West Drive. La policía, con el escuadrón de bombas del NYPD a la cabeza, acordonó la zona y cerró el acceso al público. La preocupación se extendió rápidamente por la ciudad, recordando la importancia de la seguridad en eventos masivos.
Se reportó que el dispositivo sospechoso, que parecía una granada aturdidora, fue finalmente identificado como un artefacto falso que no representaba una amenaza. Afortunadamente, la situación no pasó a mayores y la policía dio el aviso de "todo en orden" después de las 11 a.m. El dispositivo se encontraba en una zona donde se ubicarán los espectadores durante el maratón, lo que hace que la situación sea aún más tensa.
Miles de corredores se preparan para la carrera de 26.2 millas que se celebrará este domingo a las 8 a.m., con un recorrido que atravesará los cinco condados de la ciudad. La seguridad y la tranquilidad de los participantes y el público son una prioridad absoluta en este evento, y este incidente es una muestra de la importancia de estar preparados ante cualquier eventualidad.