El destino de un bebé recién nacido en Houston se encuentra en el centro de una historia que involucra a una madre biológica, una pareja adoptiva y un torbellino de emociones. En el corazón de la historia se encuentra Juniper Bryson, de 21 años, quien se convirtió en madre por segunda vez en septiembre. La joven, quien se encontraba en una situación complicada, recurrió a las redes sociales para buscar una familia para su recién nacido.
Bryson publicó en un grupo de Facebook llamado "Madres biológicas que buscan padres adoptivos", expresando su deseo de entregar a su hijo en adopción.
El anuncio llamó la atención de varias familias, entre ellas Wendy Williams, quien, conmovida por la situación, decidió ayudar. Williams, que también es madre adoptiva, se involucró activamente en el proceso, ofreciendo apoyo a Bryson durante el parto y los primeros días de vida del bebé.
La historia tomó un giro inesperado cuando se descubrió que Bryson había estado negociando el pago por el bebé con diferentes personas, incluyendo a parejas con problemas de fertilidad. "Ni siquiera es así, solo me alcanza para mudarme a un departamento para poder trabajar y recuperar a (mi hija), o un pago inicial barato, o cualquier auto para llegar a diferentes lugares con DoorDash", decía un mensaje de Bryson según los registros judiciales.
La noticia del intento de venta del bebé llegó a oídos de las autoridades, lo que llevó a la detención de Bryson. Williams, quien se sentía conectada con el bebé, luchó por obtener su custodia, pero finalmente el bebé fue entregado a un amigo de Bryson.
El caso sigue bajo investigación, y el destino del bebé aún es incierto. Williams no pierde la esperanza de volver a tenerlo en sus brazos, mientras que las autoridades investigan las acciones de Bryson.