En estados como Carolina del Norte y Pensilvania, considerados como estados clave para la victoria, los latinos han dejado de ser un grupo secundario para convertirse en un factor determinante. "Votar en un estado que no está en juego se siente muy distinto a votar en uno que sí lo es", explica Alex Bare, internacionalista de la Universidad de Iowa. "En Pensilvania, donde la batalla se libra voto a voto, las mujeres latinas han salido a las calles para apoyar a Harris", asegura Andrea Carvajal, una residente de Harrisburg.
Sin embargo, la comunidad latina no es un bloque monolítico, y las opiniones sobre la elección varían. "Creo que la economía no está tan bien como dicen, la gente no tiene dinero, incluso nosotros", comenta Oscar Acevedo, un ingeniero colombiano radicado en Carolina del Norte. "A pesar de que hay trabajo, el dinero no alcanza", agrega Oscar.
Las declaraciones de ambos candidatos, especialmente las relacionadas con la comunidad latina, han generado polémica. "La satanización de los latinos es inconcebible y es antiestadounidense", asegura el presidente Biden, quien ha criticado los comentarios de Trump sobre los migrantes. "Voy a protegerlas, a protegerlas de los migrantes que llegan", respondió Trump, quien ha utilizado el tema de la migración como un arma política.
El voto latino se divide en diversas comunidades con necesidades particulares. "Los cubanos tienen una adherencia histórica a las políticas republicanas, mientras que los mexicanos y puertorriqueños, que son los grupos más grandes, están buscando políticas que prioricen la vivienda y la salud", explica Manuel Camilo González, profesor de relaciones internacionales de la Universidad Javeriana.
La elección del Congreso también está en juego, con los republicanos en ventaja en las encuestas y los demócratas enfrentando un desgaste considerable. "Cualquier diferencia pequeña puede ser decisiva", advierte Vladimir Rouvinski, experto en política internacional. "La elección de 2016 nos enseñó que el colegio electoral puede decidir la elección a favor de un candidato que no ha ganado el voto popular."
La batalla electoral se acerca a su punto culminante y la atención está puesta en la comunidad latina, cuyo voto podría determinar el futuro de la nación.