La Salida Forzosa Diferida (DED) es un programa temporal en Estados Unidos que protege a ciertos grupos de inmigrantes de la deportación debido a situaciones excepcionales en sus países de origen. No ofrece una vía hacia la residencia permanente, sino que permite a los beneficiarios permanecer en el país de manera legal por un tiempo limitado. Actualmente, las personas de Liberia, Líbano, Hong Kong y Palestina pueden acogerse a este beneficio, que también les permite solicitar permisos de trabajo y, en algunos casos, permisos de viaje.
Este mecanismo es aplicable solo a residentes de estos países que se encontraban en Estados Unidos en fechas específicas, según memorandos presidenciales. Además, los beneficiarios pueden solicitar un Documento de Autorización de Empleo para trabajar legalmente y, si desean salir del país, deben pedir un permiso de viaje anticipado. Abandonar el país sin este permiso puede hacer que pierdan su elegibilidad para la DED.
En resumen, la DED ofrece protección temporal y la posibilidad de trabajar a ciudadanos de países con situaciones críticas, garantizando su permanencia legal en Estados Unidos mientras dure el beneficio.