La paciencia de los aficionados de Miami parece estar agotándose, y la situación para el equipo —y especialmente para su entrenador— se complica semana tras semana.
Los Dolphins cayeron 29-27 ante los Chargers de Los Ángeles en un partido que refleja la misma historia de frustración que ha marcado su temporada. "Hemos hablado como equipo sobre cerrar estos juegos cuando tenemos la oportunidad. No es solo una unidad, son todas", admitió Tua Tagovailoa, cuyo rostro reflejaba más preocupación que determinación.
- Miami desperdició una ventaja de 13 puntos en el último cuarto.
- Justin Herbert conectó un pase de 42 yardas que dejó a los Dolphins sin tiempo de reacción.
- El marcador final llegó con solo cinco segundos en el reloj.
Tagovailoa no ocultó su malestar al hablar de los problemas internos.
"Hay jugadores que llegan tarde a reuniones. Otros que ni aparecen", reveló, dejando claro que la responsabilidad no recae solo en los técnicos. El quarterback evitó mencionar directamente a
Mike McDaniel, pero sus palabras pintaron un cuadro de desorganización que va más allá del campo.
La derrota ante los Chargers es la quinta de la temporada, y cada una ha seguido un patrón demoledor:
- Pérdida por 25 puntos en la Semana 1 contra Indianapolis.
- Derrota ajustada ante Buffalo tras tener la pelota para empatar.
- Caída por seis puntos contra Nueva Inglaterra.
- Colapso ante Carolina después de ir ganando 17-0.
Jaelan Phillips, el ala defensiva, resumió el sentimiento del vestuario con dos palabras:
"Decepcionante. Es decepcionante". El silencio que siguió a su declaración habló tanto como sus palabras. En
Miami, las excusas ya no caben, y el reloj para McDaniel parece estar avanzando más rápido de lo que nadie anticipó.
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