El sindicato Trabajadores Agrícolas Unidos (UFW) ha denunciado una ola de cartas amenazantes dirigidas a sus oficinas. Estas misivas, con un lenguaje hostil y explícito, instan a denunciar a los inmigrantes indocumentados. Una de las cartas, fotografiada y compartida en la cuenta oficial de X del UFW, reza: “Reporten a extranjeros ilegales (sic). En escuelas, en el trabajo, en iglesias, en restaurantes, en tu vecindario. ¡No hay lugar dónde esconderse!”. En otra, se añade la escalofriante frase: “Ahí viene Trump.”
La situación se agrava en medio de un recrudecimiento de las políticas migratorias y el anuncio de redadas inminentes por parte del ICE. Reportes de medios en estados como Mississippi, Nuevo México y Tennessee apuntan a una disminución significativa de la presencia de trabajadores agrícolas inmigrantes, debido al temor generalizado a las deportaciones.
En Bakersfield, California, la situación es particularmente crítica. Medios locales indican que un 70% de los trabajadores agrícolas inmigrantes no se presentaron a sus labores en los últimos días. El UFW confirma este dato, añadiendo que “el impacto del miedo es más generalizado. Los trabajadores de todo el Valle Central tienen miedo de continuar con sus rutinas diarias.”
La preocupación no se limita a las redadas directas. Testigos describen la situación como discriminatoria. Como explicó Sara Fuentes, gerente de una gasolinera local: “Se trataba de una discriminación, eran puramente trabajadores del campo. No detuvieron a las personas con uniformes de FedEx, estaban deteniendo a las personas que parecían trabajar en los campos.”
La ola de amenazas por correo y el aumento de las redadas han creado una atmósfera de tensión palpable en el sector agrícola de California, dejando a muchos trabajadores en una situación de vulnerabilidad y precariedad.