El epicentro del problema: el Departamento de Educación de la Ciudad de Nueva York (DOE). Su decisión de no renovar el contrato de arrendamiento de 'Nuestros Niños', una institución en el barrio de Los Sures desde 1973, ha desatado una ola de protestas. La razón oficial: el alza exorbitante en el precio del alquiler del edificio, que según el DOE, no se justifica con la matrícula actual.
Pero la directora de 'Nuestros Niños', Ingrid Matías Chungata, refuta tajantemente esta versión. “Aquí cualquiera puede venir a este centro y puede ratificar que está a capacidad plena en 2-K, 3-K. Solo hay siete cupos disponibles en 4-K,” afirma con firmeza, destacando que el centro es el único bilingüe que atiende a la comunidad latina en la zona. Más que una guardería, lo describe como “un patrimonio de más de 50 años de este vecindario.”
La situación se complica aún más con el anuncio del cierre inminente de otros tres centros en Brooklyn: Grand St. Settlement, Friends of Crown Heights, y Fort Greene Council. A esto se suma el cierre anunciado de 'All My Children' en Jamaica, Queens. Se trata de un golpe directo a más de 250 niños y más de 90 empleados, en su mayoría mujeres.
El impacto va más allá de la simple falta de cupos. 'Nuestros Niños' ofrece, entre otros servicios, comidas caseras preparadas por las abuelas del vecindario, adaptadas a las necesidades dietéticas de cada niño; una opción asequible, poco común en un barrio con costos de vida en constante aumento. El cierre significaría la pérdida de 44 empleos, afectando desproporcionadamente a mujeres de color.
El DOE, por su parte, asegura que las familias afectadas tendrán opciones alternativas de calidad.
- Argumentan que utilizan datos para optimizar la asignación de recursos.
- Destacan que los centros afectados mostraban baja inscripción en años anteriores.
- Señalan que existen cupos disponibles en centros cercanos.
La situación ha generado un fuerte rechazo político, con críticas que cuestionan la aparente contradicción entre las promesas del alcalde Eric Adams de ampliar el acceso a servicios de cuidado infantil y los recortes presupuestarios en este sector. Incluso se ha comparado la dificultad para financiar estos centros con la facilidad para financiar hoteles para migrantes, generando controversia.
Mientras tanto, la comunidad de 'Nuestros Niños' se prepara para una manifestación este viernes 24 de enero, luchando por un futuro incierto ante la amenaza de perder una institución arraigada en su historia.