Trump firma orden ejecutiva contra 'Perkins Coie' por prácticas de DEI

...

La Casa Blanca ha estado en el ojo del huracán últimamente, y no precisamente por las tradicionales disputas políticas; un nuevo capítulo se ha abierto en la compleja relación entre el poder ejecutivo y el sector legal, con consecuencias que podrían trascender las fronteras de Washington

Autor

Nicol Matuz Scott el 06/03/2025 04:10 PM.
En Internacional y editada el 06/03/2025 04:14 PM.

El epicentro de la controversia radica en una orden ejecutiva firmada por el presidente Donald Trump el pasado jueves. Esta orden, según fuentes de la administración, apunta directamente a Perkins Coie, una firma de abogados internacional de renombre.

Pero, ¿qué motivó esta drástica medida? Según un comunicado distribuido por la Casa Blanca, la decisión se basa en alegatos de “prácticas ilegales de DEI” por parte de Perkins Coie, refiriéndose a sus programas de Diversidad, Equidad e Inclusión. El Secretario de la Casa Blanca, Will Scharf, acusó a la firma de usar “cuotas raciales” en sus procesos de contratación y ascensos.

La orden ejecutiva, además de exigir una “revisión integral de las prácticas ilegales de DEI en algunas de las firmas de abogados más grandes del país,” contempla sanciones concretas para Perkins Coie. Estas incluyen:

Suspensión de las autorizaciones de seguridad para algunos empleados.
Prohibición de contratación de empleados de Perkins Coie por parte de agencias federales, excepto con permisos especiales.
Eliminación de los pagos federales a contratistas representados por la firma.

Es importante resaltar que, aunque la Corte Suprema ha prohibido la acción afirmativa en las admisiones universitarias, y la ley federal prohíbe la discriminación en el lugar de trabajo por motivos de raza, sexo y otros criterios, no existe una ley que prohíba los esfuerzos de diversidad e equidad dentro de empresas privadas. La falta de claridad en los criterios para determinar qué constituye una “práctica ilegal” genera incertidumbre.

La firma Perkins Coie, cabe recordar, representó a la campaña de Hillary Clinton y al Comité Nacional Demócrata durante las elecciones presidenciales de 2016. Este hecho, unido a la contratación de Fusion GPS (que generó el controvertido expediente Steele), la coloca en el centro de una narrativa que el presidente Trump ha descrito repetidamente como el “engaño ruso.” Sin embargo, los abogados principales involucrados en esa representación, Marc E. Elias y Michael Sussman, ya no trabajan para la firma.

Esta acción contra Perkins Coie sigue a una medida similar tomada la semana pasada contra Covington & Burling, firma que representó al fiscal especial Jack Smith en las investigaciones federales contra Trump. Ambas decisiones podrían sentar un precedente significativo, limitando el acceso de estas firmas a recursos federales y potencialmente disuadiendo a otras firmas de enfrentarse a la administración Trump en los tribunales.

La Casa Blanca no ha ofrecido mayores detalles sobre el alcance de la "revisión integral" ni sobre qué otras firmas podrían ser objeto de investigación. La situación se mantiene en desarrollo, con implicaciones de gran calado para el sistema legal estadounidense y la relación entre el poder político y las firmas de abogados.