Abuelo muere tras tiroteo en McDonald's de Texas

Alrededor de las 5:30 p.m., Jorge Arbaiza, un abuelo de 61 años, se encontraba en la fila, un escenario cotidiano para muchos. Su misión: comprar Happy Meals para sus nietos. Este detalle, aparentemente trivial, se convertiría en un trágico epílogo a su vida.
De pronto, la calma se desvaneció. Una pelea entre dos grupos, uno de seis a siete jóvenes y otro de dos a tres hombres, escaló rápidamente. El intercambio de golpes dio paso a los disparos. El caos se apoderó del restaurante, lleno de clientes inocentes, entre ellos niños.
En medio del tiroteo, Jorge Arbaiza, ajeno a la disputa, recibió varios disparos. Según el Sheriff del Condado de Harris, Ed González, "lo que más nos impresionó fue que, al exhalar su último aliento, el Sr. Arbaiza se persignó y oró. Que descanse en paz."
Arbaiza fue trasladado al hospital, donde lamentablemente falleció. Otro hombre de 25 años, involucrado en la pelea, también resultó herido de bala, pero se espera que se recupere. Las investigaciones apuntan a Antoine Ridge, de 24 años, como el principal responsable. Fue arrestado y acusado de asesinato.
Los antecedentes de Ridge no son alentadores. Los registros judiciales revelan una orden de arresto pendiente por agresión agravada contra un familiar, un caso abierto por conducción temeraria, y antecedentes en Florida por delitos menores, incluyendo hurto y falsificación de documentos. En cada ocasión, fue sentenciado a libertad condicional.
La fianza de Ridge se fijó en un millón de dólares. Su próxima cita judicial está programada para el lunes. El suceso ha dejado una profunda huella en la comunidad, destacando la fragilidad de la vida y las consecuencias imprevistas de la violencia.
El restaurante, testigo silencioso de una noche trágica, ha retomado su actividad, pero la memoria de Jorge Arbaiza, el abuelo que solo quería alegrar a sus nietos, permanece imborrable.