¿Puede un inmigrante ser deportado si tiene un hijo en Estados Unidos?

El caso de familias con hijos nacidos en Estados Unidos, que automáticamente obtienen la ciudadanía, no garantiza la permanencia de sus padres indocumentados. Según la firma legal Lincoln-Goldfinch Law, "los padres de niños nacidos en Estados Unidos, pero clasificados como extranjeros ilegales, no tienen los mismos derechos que sus hijos nacidos en Estados Unidos". Esta afirmación resume la cruda realidad que enfrentan muchos.
Si las autoridades migratorias detienen a un padre indocumentado, la familia se enfrenta a una terrible encrucijada: exilio o separación. Llevarse al hijo al país de origen implica arrancar al menor de su vida, amigos y entorno familiar construido en Estados Unidos. Por otro lado, dejarlo bajo la tutela de un familiar o, en el peor de los casos, bajo la custodia del estado, significa vivir con la angustia de la distancia y la incertidumbre.
El proceso para que los padres obtengan la residencia permanente es arduo y prolongado. Se requiere que el hijo, una vez cumplidos los 21 años, actúe como patrocinador y presente el formulario I-130 del Servicio de Ciudadanía e Inmigración de Estados Unidos (USCIS). Este proceso, lejos de ser sencillo, implica:
La situación de estas familias destaca la complejidad del sistema migratorio estadounidense y la fragilidad de las familias inmigrantes que luchan por construir una vida mejor, a menudo enfrentando la posibilidad de una separación forzada por la ley.