Demócratas se oponen a ley para evitar voto de inmigrantes ilegales, pese al apoyo popular

En el centro de la polémica se encuentra la Ley SAVE (Safeguarding American Voter Eligibility), impulsada por el Partido Republicano y respaldada por el presidente Donald Trump. Esta ley, aprobada el jueves con un margen estrecho de 220 votos a favor y 208 en contra, busca reforzar los requisitos de ciudadanía estadounidense para votar en elecciones federales. La votación estuvo dividida, con 208 demócratas oponiéndose a la medida.
Según los republicanos, como el representante Chip Roy (R-Texas) y el senador Mike Lee (R-Utah), la ley es crucial para prevenir el fraude electoral y asegurar que solo ciudadanos estadounidenses participen en el proceso democrático. "Después de cuatro años de inmigración ilegal masiva facilitada por la administración Biden, es más importante que nunca asegurar que solo los ciudadanos estadounidenses voten en las elecciones estadounidenses," afirmó el representante Tom Emmer (R-Minn.), Mayoritario del látigo de la Cámara.
Sin embargo, la oposición demócrata argumenta que la ley es innecesaria y que el fraude electoral por parte de no ciudadanos es extremadamente raro. "Intentar registrarse para votar siendo no ciudadano es extremadamente raro, y si lo hacen, enfrentan consecuencias severas, incluyendo multas de hasta cinco años de prisión y deportación," dijo la representante Suzanne Bonamici (D-Ore.) durante el debate en la Cámara.
El debate se intensifica al considerar las implicaciones prácticas de la ley. El representante Joe Morelle (D-N.Y.), por ejemplo, afirmó que la ley "pondría fin al proceso de registro de votantes para todos los estadounidenses tal como lo conocen." Este punto de vista destaca la preocupación de que la ley podría dificultar el acceso al voto para algunos ciudadanos.
La aprobación de la ley en la Cámara de Representantes no significa su implementación inmediata. La Ley SAVE ahora debe ser aprobada en el Senado, donde se requiere una mayoría de 60 votos para superar cualquier obstrucción legislativa. El resultado final dependerá de la postura que adopten los senadores, incluyendo a aquellos pertenecientes al Partido Demócrata.
Un dato relevante es que, según encuestas como la de Gallup, existe un amplio apoyo público a medidas que requieren identificación con foto para votar, sugiriendo una opinión pública favorable a una mayor seguridad electoral, aunque la interpretación de esta tendencia puede variar significativamente entre los diferentes grupos políticos.
La ley también plantea interrogantes sobre la competencia entre la legislación federal y la legislación estatal en materia de registro de votantes, dada la disparidad de normas existentes entre los diferentes estados.