Un viernes por la madrugada, en la colonia Ejidal de Navolato, Sinaloa la tranquilidad de la noche se vio interrumpida por un fuerte estruendo. Oscar Fernando N, de 29 años, se encontraba manipulando un arma de fuego en su domicilio cuando, de forma inesperada, se le escapó un disparo. La bala, con una trayectoria errática, rozó su rostro, causándole lesiones en la nariz y la frente.
El incidente, que pudo haber tenido consecuencias más graves, alertó a los familiares de Oscar, quienes lo trasladaron rápidamente a un hospital de la cabecera municipal. Ahí, el joven recibió la atención médica necesaria.
Posteriormente, la noticia del incidente llegó a oídos de las autoridades, quienes acudieron al nosocomio para iniciar las investigaciones correspondientes.
Es fundamental recordar que la irresponsabilidad al manejar armas puede tener consecuencias fatales.