La presidenta electa afirmó que no ha habido una adecuada coordinación con el gobierno estadounidense y subrayó que persisten dudas sobre la captura de capos como Ismael "El Mayo" Zambada y Joaquín Guzmán López, hijo de "El Chapo".
Claudia Sheinbaum destacó la necesidad de una colaboración efectiva con las agencias de Estados Unidos, señalando que la falta de coordinación ha llevado a confusiones, como la liberación de un narcotraficante para capturar a otro. Además, enfatizó la importancia de un esfuerzo conjunto para construir la paz y controlar la violencia, mencionando que, aunque hay preocupaciones sobre el fentanilo que ingresa a Estados Unidos, también corresponde a ese país tomar medidas adecuadas.
En relación a la posible transición de la Guardia Nacional a la Secretaría de la Defensa Nacional, Sheinbaum aclaró que esto no conlleva una militarización. Aseguró que las decisiones seguirán siendo tomadas por un mando civil, subrayando el compromiso de respetar los derechos humanos en este proceso.
Finalmente, ante rumores sobre la salida de Rogelio Ramírez de O, secretario de Hacienda, Sheinbaum desmintió tales especulaciones, afirmando que él continúa formando parte de su equipo. Esto refuerza su enfoque en mantener estabilidad dentro de su administración y fortalecer la colaboración entre distintas dependencias.