Si bien la atención se centró en su juicio en la Unión Americana, la Fiscalía General de la República (FGR) ha estado trabajando en paralelo, explorando posibles delitos cometidos por el ex funcionario durante su tiempo al frente de la seguridad nacional.
La FGR ha abierto al menos tres carpetas de investigación, cada una enfocada en un delito diferente:
- Operación Rápido y Furioso: La investigación se remonta a 2009, cuando la Procuraduría General de la República (PGR) comenzó a indagar sobre la introducción clandestina de armas al país. La FGR reactivó la investigación en 2020, acusando a García Luna de facilitar la entrada de armas, municiones y explosivos al territorio nacional.
- Construcción de Centros Federales de Readaptación Social: La FGR investiga la adjudicación de contratos de forma directa a empresas creadas entre julio y octubre de 2010. Estas empresas, con vínculos a García Luna, recibieron contratos para la construcción de centros penitenciarios con costos exorbitantes.
- Lavado de Dinero: La Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) ha implicado a García Luna en operaciones de lavado de dinero, un delito que la FGR también investiga.
La FGR no ha dado a conocer un cronograma específico para el avance de las investigaciones ni ha confirmado la existencia de pruebas concretas que impliquen a García Luna en los delitos investigados. Lo que sí es claro es que las autoridades mexicanas siguen dando pasos para investigar las posibles responsabilidades del ex funcionario en México, más allá de la condena que recibió en Estados Unidos.