Detrás del brillo turístico, una realidad oscura se oculta, aprovechándose de la vulnerabilidad de quienes buscan una oportunidad.
La Fiscalía estatal de Quintana Roo, en colaboración con la Guardia Nacional, ejecutó una orden de cateo en un establecimiento nocturno ubicado en la carretera federal Cancún-Tulum. El objetivo: desarticular una red que sometía a las mujeres a condiciones de trabajo desfavorables.
El golpe se produjo en un local que prometía oportunidades, pero en realidad se escondía un infierno. Durante la operación, fueron rescatadas 14 mujeres, entre ellas cuatro extranjeras provenientes de Perú, Colombia, Argentina y Venezuela. Se les había prometido un futuro mejor, pero encontraron una trampa.
Adrián “N”, quien se encontraba en el lugar, fue detenido como presunto responsable de la explotación. Las investigaciones apuntan a que este individuo se encargaba de reclutar a las mujeres, aprovechando su situación económica o migratoria. Les ofrecía falsas promesas de empleo y luego las sometía a condiciones de trabajo desfavorables, imponiéndoles multas por cualquier "incumplimiento".
El caso desvela un panorama complejo en el que la explotación laboral se camufla tras la fachada turística. Las autoridades aseguraron el local, impidiendo su funcionamiento. Las mujeres rescatadas fueron trasladadas a la Fiscalía de Quintana Roo, donde se les brindó apoyo psicológico y legal para que puedan reconstruir sus vidas.