Sheinbaum expresó su "discrepancia con el magnate, quien considera que los migrantes son delincuentes", y recordó que "para eso existen las instituciones de justicia en cualquier lugar del mundo". En caso de que se produzcan deportaciones, el gobierno mexicano está preparado para recibir a los ciudadanos mexicanos y tiene un plan para ello. Sin embargo, la presidenta enfatizó que se trabajará para demostrar que no hay razones para deportar a los connacionales.
Entre los argumentos que se utilizarán para defender a los trabajadores mexicanos en Estados Unidos se encuentran los siguientes:
- La aportación de los trabajadores mexicanos en impuestos y ocupación de puestos de trabajo que requiere la economía estadunidense.
- La importancia de la relación comercial entre México y Estados Unidos, que beneficia a ambos países.
Finalmente, la presidenta Sheinbaum destacó que el acuerdo comercial de América del Norte es beneficioso para los tres países involucrados y que se mantendrá la alianza en el futuro. "Nosotros creemos que hacia adelante hay muchos argumentos, muchos datos, mucha información, que fortalecen que se mantenga esta alianza", dijo.